Situado en primera línea de la Playa de Mascarat en Altea, este alojamiento ofrece una ubicación inmejorable a tan solo unos pasos del mar. La playa cercana cuenta con un chiringuito de temporada desde Semana Santa hasta Todos los Santos. Desde el apartamento se puede disfrutar de unas vistas espectaculares al Mediterráneo, al puerto deportivo de Greenwich, a la isla e incluso a los lejanos skylines de Albir y Benidorm.
El edificio ofrece excelentes comodidades, que incluyen una gran piscina comunitaria, jardines bien cuidados con sombra tropical y un servicio de conserjería a tiempo completo los 7 días de la semana.
El apartamento de un dormitorio es excepcionalmente espacioso. La sala de estar es luminosa y espaciosa, con una zona de estar con vistas al mar, un comedor y una cocina moderna semiabierta. El amplio dormitorio ofrece un amplio espacio de almacenamiento incorporado y acceso a una terraza más pequeña, que sirve como un práctico espacio para guardar cosas o lavar la ropa. El lujoso baño cuenta con una ducha a ras de suelo y la propiedad está terminada con materiales de alta calidad, incluidos pisos de mármol.
Lo más destacado de esta casa es la amplia y soleada terraza principal, que ofrece impresionantes vistas panorámicas: un espacio sereno para relajarse en un entorno tranquilo.
Entre las características adicionales se incluyen aire acondicionado frío y calor, calefacción por paneles infrarrojos y la opción de comprar una plaza de aparcamiento subterráneo por 15.000 €. Esta joya frente al mar es una elección perfecta para quienes buscan tranquilidad y lujo en la Costa Blanca.